EROS ES MI HÉROE

  • AUTOR: // SECCIÓN: Diagnóstico, Trazos

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          “To sex or not to sex, that´s the question”

     

    Nos hemos olvidado del erotismo, amiguitos y amiguitas, una parte fundamental de nuestra vida social y particular de relacionarnos con las personas del sexo opuesto. Por eso queríamos dedicarle un especial de Trazos al comic erótico, el cual  nos ha ayudado a muchos de nosotros a pasar página de muchos sofocos sufridos, sobre todo en la adolescencia.
    Y distingo en primer lugar, erotismo de pornografía, como algo mucho más sutil y edificante que la explicitez de la segunda, no renunciando tampoco a que entre ellas haya una sutil línea difusa que en ocasiones se nos haga dificil distinguirlas. Os mentiría si os dijera que pienso que el erotismo es mejor que la pornografía, porque no es cierto, creo que el ser humano necesita de ambas y a veces necesitamos de una o de otra, o una lleva a la segunda como decia antes. Porque es como la diferencia que puede que exista a lo mejor entre comer un bocadillo de chorizo o un sandwich de foie a las finas hierbas: cada cosa tiene su aquél.
    En el mundo del comic también es incluso aún mucho más difícil de distinguir. Porque en muchos casos, como fue en España durante la Transición, era más bien una apuesta de destape no solo físico, sino ideológico y estético, y una manera de provocar contra lo establecido y como necesidad de expresión de un régimen censor que había provocado esa explosión masiva pero necesaria que supuso el primer comic erótico de nuestro país.
    Luego fue avanzando hasta que en los 90 llegó su mayor esplendor como la mayoría del comic que se publicaba, pero no terminó de desaparecer nunca del todo debido a que quizá nunca fue tampoco tan mayoritario como el comic mas mainstream de superhéroes o mortadelos que imperaba por entonces en los kioskos. Pero desgraciadamente, debido a las nuevas tecnologías en las que todo se puede encontrar gratis en la lóbrega soledad del monitor de un ordenador conectado a internet, se ha dado un golpe casi certero a un género que siempre ha gozado de buena salud en nuestro país, y sobre todo, de nuestra simpatía, no solo por su aspecto más lascivo, sino como expresión de como piensa un país a través de las páginas de sus comics.
    Desde aquí queríamos hacer nuestro pequeño y particular homenaje a todos esos grandes pioneros del comic erótico, y a aquellos que aun hoy en día siguen luchando contra viento y marea contra lo establecido, ya que ahora lo que se lleva es hacerlo todo de una manera fría y sin sentimiento a través de las corrientes cibernéticas, siempre añoraremos la calidez de las páginas de nuestros comics eróticos favoritos.

    Nos hemos olvidado del erotismo, amiguitos y amiguitas, una parte fundamental de nuestra vida social y particular de relacionarnos con las personas del sexo opuesto. Por eso queríamos dedicarle un especial de Trazos al comic erótico, el cual  nos ha ayudado a muchos de nosotros a pasar página de muchos sofocos sufridos, sobre todo en la adolescencia.

    Y distingo en primer lugar, erotismo de pornografía, como algo mucho más sutil y edificante que la explicitez de la segunda, no renunciando tampoco a que entre ellas haya una sutil línea difusa que en ocasiones se nos haga dificil distinguirlas. Os mentiría si os dijera que pienso que el erotismo es mejor que la pornografía, porque no es cierto, creo que el ser humano necesita de ambas y a veces necesitamos de una o de otra, o una lleva a la segunda como decia antes. Porque es como la diferencia que puede que exista a lo mejor entre comer un bocadillo de chorizo o un sandwich de foie a las finas hierbas: cada cosa tiene su aquél.

    En el mundo del comic también es incluso aún mucho más difícil de distinguir. Porque en muchos casos, como fue en España durante la Transición, era más bien una apuesta de destape no solo físico, sino ideológico y estético, y una manera de provocar contra lo establecido y como necesidad de expresión de un régimen censor que había provocado esa explosión masiva pero necesaria que supuso el primer comic erótico de nuestro país.

    Luego fue avanzando hasta que en los 90 llegó su mayor esplendor como la mayoría del comic que se publicaba, pero no terminó de desaparecer nunca del todo debido a que quizá nunca fue tampoco tan mayoritario como el comic mas mainstream de superhéroes o mortadelos que imperaba por entonces en los kioskos. Pero desgraciadamente, debido a las nuevas tecnologías en las que todo se puede encontrar gratis en la lóbrega soledad del monitor de un ordenador conectado a internet, se ha dado un golpe casi certero a un género que siempre ha gozado de buena salud en nuestro país, y sobre todo, de nuestra simpatía, no solo por su aspecto más lascivo, sino como expresión de como piensa un país a través de las páginas de sus comics.

    Desde aquí queríamos hacer nuestro pequeño y particular homenaje a todos esos grandes pioneros del comic erótico, y a aquellos que aun hoy en día siguen luchando contra viento y marea contra lo establecido, ya que ahora lo que se lleva es hacerlo todo de una manera fría y sin sentimiento a través de las corrientes cibernéticas, siempre añoraremos la calidez de las páginas de nuestros comics eróticos favoritos.

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