HACIENDO EL INDIE

  • AUTOR: // SECCIÓN: Zoo

    1 Comentario

    Indie Game

    Crowdfunding, independencia y otras panaceas.

    Hace unos meses por fin salió un proyecto que esperaba desde hace mucho tiempo, Indie Game: The Movie. En él se nos narran (parte de) las vicisitudes que padecieron los autores de tres juegos independientes. Uno ya publicado (Braid), uno que se acababa de publicar en el Live Arcade mientras se rodaba el documental (Super Meat Boy) y uno que, aún sin haber salido, estaba generando una gran cantidad de hype (Fez).

    En la película se puede apreciar claramente lo mal que lo pasan los cabezas de cartel del Team Meat o el señor Fish para sacar adelante sus respectivos proyectos… pero sin explicar cómo lo logran.

    De acuerdo en que el factor humano es importante pero se evita el hablar de temas económicos, de los mecanismos mediante los que contactó con la gente de Microsoft, o cuales son las condiciones contractuales que aceptaron para que les publicasen los juegos en el Live Arcade.

    Del documental podemos sacar la siguiente conclusión: 

    Es el momento, lánzate. Ahora o nunca. Si te empeñas puedes.

    Como si de un manual de autoayuda barato se tratase.

     

    La red lleva una temporada diciéndonos que ha llegado la hora de que triunfemos. De que mostremos al exterior todo el “arte” que llevamos dentro. Ahora lo entenderán, parecen querer decir. Lo pequeño mola. Es el fin de los grandes emporios que machacan a quienes realmente tienen las ideas.

    Puedes hacerlo, insisten. No necesitas a nadie más, háztelo tú mismo. Conviértete en el siguiente Notch, o Blow, júntate con un par de colegas (o alguien que acabes de conocer por internet) y arrasa en el market como los chicos del Team Meat, peléate con ellos y alcanza el estatus de “estrella independiente” como Fish (aunque no llegues a tener una página con tu nombre en la Wikipedia o tu juego sea una beta eterna)

    Es más ¿para qué andarte con chiquitas? Cómprate un garaje y sé el nuevo Gates o Job. Incluso “vacas sagradas” de todos los ámbitos, como Schaffer, Silvestri o Stephenson han tomado ese camino. Da igual que se trate de juegos, tebeos, libros o lo primero que se les pase por la cabeza.

    Móntate un proyecto en Kickstarter, en IndieaGoGo, Verkami, o cualquiera de los sitios de crowdfunding que surgen últimamente como setas.

    Saca tu producto… Como si quieres ponerte a hacer un ordenador, una consola, o tu propia línea de cosméticos.

    Eh, tío, seguro que hasta te dedicarán un documental.

    Nada puede fallar… Todos se están forrando, ¿a qué estás esperando?

     

    Mires por donde mires, en el campo que mires, no tardas en llegar a algún “caso de éxito”. Parece que la fórmula es imparable, imbatible e irrefutable… Aunque ya se empiezan a ver las primeras sombras amenazando con tragarse ese brillante futuro. A todo el mundo parece que se le llena la boca con esta “nueva” manera de hacer las cosas, como si estuvieran inventando la rueda de nuevo.

    Pero claro, basta que busquemos un poco por la red para que descubramos que ¡sorpresa! resulta que estos juegos no los ha hecho un equipo de una sola persona.

    Braidhttp://www.mobygames.com/game/xbox360/braid/credits

    Suoer Meat Boyhttp://www.mobygames.com/game/xbox360/super-meat-boy/credits

    Fezhttp://www.mobygames.com/game/xbox360/fez/credits

    Hay un “plan” (y un vídeo de presentación molón) por detrás.

    Incluso los que tienen la plataforma insignia se están empezando a asustar un poco, y van puntualizando lo que son (por si acaso). Kickstarter no es una tienda dicen. 

    Pero en el fondo sí que lo es. Es un gran catálogo de pre-pedidos. No es una inversión, porque sólo ganas el producto (y/o/u) una palmadita en la espalda y el ego. Pero eso sería tema para otro artículo.

     

    Volviendo al caso de Indie Game, se nos narra otra vez el “sueño americano”: El háztelo tú mismo. Hay angustia, hay sufrimiento y hay esperanza, pero lo que no hay son datos: ¿De qué ha vivido esta gente durante los años que han dedicado a esos proyectos?

    Por lo que se puede ver en la página de la Wikipedia, hacer Braid le costó al señor Blow 180000 dólares de su propio bolsillo. Vamos, como comprarte una casa. Algo como para lanzarte a lo loco.

    Del Super Meat Boy no se dice cuánto dinero se han gastado sus autores. Vale, lo han recuperado y en el documental se deja entrever, que al entrar a desarrollar para su plataforma, Microsoft te asigna una especie de contacto que te hace las veces de “productor”, pero no se profundiza en ello. Lo que tampoco se dice es si hay que pagar por ello (algo que tampoco se ve a simple vista en su propia página

    Lo que sí queda claro, en el caso de Fez y sus múltiples bugs, es que programar para Microsoft es muy caro y si quieres corregir según que nivel de errores tienes que pagar aún más, lo que provocó una movida considerable de acusaciones cruzadas entre Polytron y Microsoft, cuyos ecos perduran hasta hoy (y que les han costado múltiples críticas por parte del fandom)

     

    En resumidas cuentas, Indie Game: The Movie es un documental interesante y recomendable pero, más allá de su componente emotivo, supone una oportunidad perdida por su falta de rigor.

COMMENTS

1 Response to Haciendo el indie

  • Armabot wrote on November 7, 2012 at 5:41 // Reply

    Estupendo documental. A día de hoy suele interesarme más lo que hay detrás de los juegos que los juegos en sí, y sin duda lo más interesante de la actualidad lo encontramos en la escena indie.

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